¿Listo para crecer en mercados de habla inglesa? No es solo traducir—es ajustar tu enfoque. Con la estrategia correcta, destacas a nivel global.
Olvida la jerga y los términos de moda. Explícalo de forma que un niño de 12 años lo entienda… y que un CEO quede impresionado.
No solo es inglés, es contexto. Cambia “soluciones innovadoras” por “Te ayudamos a vender más, y más rápido”.
No es un “demográfico”. Es una persona real, sentada en un escritorio, contra reloj, buscando ayuda. Empieza desde ahí.
Si tu sitio web no responde a sus preguntas en 5 segundos, es ruido. Corrígelo.
Olvida el “reconocimiento de marca” por un momento. ¿Qué quieres que hagan? ¿Que den clic? ¿Que llamen? ¿Que compren? Construye todo alrededor de eso.
Los “likes” no pagan la renta. Mide prospectos. Mide ventas. Mide confianza. Luego, duplica lo que sí funciona.
¿Qué se está perdiendo en la traducción?